Blog del proyecto ciudadano "Defensor del Menor" de Leganés


El deber de protección a la infancia es el derecho de la infancia a ser protegida. Este deber nos obliga a nosotros, a nosotras, las personas adultas, a intentar garantizar los derechos fundamentales de los y las menores, y a hacerlo no sólo exigiendo políticas activas, no sólo poniendo en marcha actividades solidarias sino incluyendo también la objeción de conciencia, la desobediencia civil y pacífica a normas y leyes cuando estas repercuten negativamente sobre las condiciones de vida de nuestros niños y nuestras niñas.


martes, 23 de abril de 2024

Desahuciar significa quitar la esperanza

Desahuciar significa quitar la esperanza.



Hoy nos hacemos eco del informe publicado por UNICEF España titulado "Yo también vivo aquí.  Vivienda, pobreza y derechos de infancia". 

Nos cuentan que:

La palabra castellana ahuciar, actualmente en desuso, significa “esperanzar o dar confianza” . Mucho más conocida, y por desgracia en pleno uso actual, es la palabra desahuciar, en su acepción que la relaciona con el proceso legal para expulsar u obligar a salir a una persona de una casa o de un terreno que ocupa o tiene arrendado. Desahuciar, sin embargo, mantiene también su acepción original como antónimo de ahuciar, es decir: “Quitar a alguien toda esperanza de conseguir lo que desea” .  

El acceso a una vivienda adecuada es un derecho humano, un elemento clave de estabilidad de los hogares (de las personas) y para el desarrollo de niños y niñas hasta “el máximo de sus capacidades”. Como han destacado UNICEF y ONU Habitat: “Las investigaciones demuestran que el acceso de los niños a una vivienda adecuada contribuye a eliminar la pobreza infantil; mejora la salud; crea entornos educativos propicios; reduce las desigualdades de género; aumenta el acceso a los servicios básicos y a una tenencia segura; mejora el bienestar, la seguridad alimentaria, la seguridad y la movilidad; y, en última instancia, es un factor clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible y construir un futuro sostenible para la próxima generación".


El acceso a una vivienda adecuada es un derecho humano contemplado en los tratados internacionales, también para los niños y niñas. UNICEF estima que 1.600 millones de personas viven en infraviviendas en todo el mundo, entre ellas un número cada vez mayor de niños y niñas.

En nuestro país la vivienda se está convirtiendo, desde hace muchos años, en un bien cada vez menos accesible para una parte importante de la población, por 
  • el crecimiento de los precios, 
  • por la inexistencia de un parque suficiente de vivienda en alquiler, 
  • por la baja inversión en protección social de la vivienda o 
  • por la notoria escasez de vivienda pública, especialmente en alquiler, que es la opción habitacional para las familias más vulnerables. 
  • A esto, se unen situaciones de discriminación y barreras en el acceso a la vivienda por razón de etnia y nacionalidad, pero también por el tipo de familia (como las monoparentales).
La tasa de pobreza infantil en España es del 28,9%, es decir 2,3 millones de niños y niñas. Pero, además, deduciendo de los ingresos los gastos de la vivienda, 780.000 niños, niñas y adolescentes más caerían en riesgo de pobreza, elevando la tasa hasta el 38,6% (2023).